Audi apunta a la producción total de automóviles eléctricos en 2033
Audi, la empresa «vorsprung durch technik», apuesta totalmente por la electricidad. La marca ya ha anunciado que ha dejado de desarrollar motores de combustión interna de gasolina y que solo lanzará modelos totalmente eléctricos a partir de 2026. Para 2033, Audi dejará de fabricar coches de gasolina por completo. Su plan es uno de los más agresivos entre los fabricantes europeos tradicionales.
La empresa ya está inmersa en los preparativos para la transición a la producción totalmente eléctrica. Y a diferencia de muchas otras marcas, Audi no tiene la intención de abrir nuevas fábricas para construir sus nuevos modelos eléctricos. En cambio, se basará en su red de producción global existente para lograr sus objetivos eléctricos.
«Paso a paso, estamos llevando todas nuestras plantas al futuro», dijo Gerd Walker, responsable de Producción y Logística del Consejo de Administración de Audi. «No queremos ningún proyecto de faros independiente en terrenos totalmente nuevos. En cambio, estamos invirtiendo en nuestras plantas existentes para que terminen siendo tan eficientes y flexibles como las plantas de producción recién construidas o las plantas totalmente nuevas».
Según Walker, este enfoque es mucho más sostenible que el de las nuevas fábricas que están construyendo los competidores. Es más sostenible desde el punto de vista económico (aunque las inversiones de la empresa ascenderán a miles de millones de euros), pero también es más sostenible desde el punto de vista ecológico. No construir nuevas fábricas significa no tener que revolucionar nuevos entornos y, en cambio, mejorar la infraestructura y el espacio existentes de Audi. Audi denomina a este enfoque la fábrica 360°, que consiste en equilibrar las demandas de sus consumidores, partes interesadas y empleados.
Audi invertirá en la formación y la productividad de los vehículos eléctricos
Para lograr sus objetivos de producción, Audi se apoyará en su personal actual y mejorará sus habilidades de aquí a 2025. Solo su presupuesto de formación asciende a 500 millones de euros. Al final del proceso, la producción eléctrica se expandirá desde los dos sitios actuales en Alemania y Bélgica a plantas en todo el mundo: México, Hungría, China y más allá. La próxima planta que se dedicará a la producción de vehículos totalmente eléctricos será la planta original de Audi en Ingolsadt, que comenzará la producción del e-tron para el sexto trimestre el año que viene. Para 2029, todas las plantas de la empresa producirán al menos un modelo eléctrico, y los modelos de combustión se eliminarán gradualmente a partir de 2030.
Audi también tiene la intención de utilizar la transición para eléctrica para realizar mejoras importantes en la productividad en todas sus fábricas. Afirma que la producción futura será mucho más económica que la actual y planea reducir los costos anuales de fábrica a la mitad para 2033. Esto se logrará en gran medida reduciendo la complejidad de sus vehículos cuando esto no beneficie al cliente.
¿Qué significa eso para ti? La mayoría de los componentes que no puedas ver ni tocar, como los sistemas de climatización, el software de información y entretenimiento y otros sistemas relacionados, se compartirán entre más modelos. Los conjuntos modulares de componentes seguirán permitiendo un alto grado de variabilidad entre los distintos productos.
La producción en las grandes fábricas todavía se rige en gran medida por grandes ordenadores a escala industrial; en la transición a la electricidad, Audi pasará a utilizar servidores locales de menor coste, lo que debería reducir los costes de TI y hacer que la producción sea más eficiente.
Hacia la neutralidad de carbono
Los nuevos procesos de producción, más flexibles, permitirán que la producción de automóviles eléctricos se integre sin problemas en las líneas de producción existentes, que actualmente fabrican vehículos de gasolina. Por ejemplo, cuando el nuevo Q6 e-tron se lanzará, se fabricará en Ingolstadt en la misma línea de producción que los coches de gasolina Audi A4 y A5. Los vehículos eléctricos reemplazarán gradualmente a los vehículos de combustión con el tiempo.
La conversión cuidadosa y escalonada de la producción de gasolina a eléctrica en las fábricas existentes es una parte clave de los esfuerzos de Audi para reducir su huella ecológica. El objetivo declarado de la empresa es lograr que todos sus centros de producción de todo el mundo sean neutros en carbono para 2025. Los próximos pasos del plan de la empresa incluyen abordar la eficiencia de los recursos y el agua, y proteger y preservar la biodiversidad. De hecho, en 2018, la planta de Audi en México se convirtió en la primera planta del mundo en producir automóviles totalmente libres de aguas residuales.
Para 2030, la compañía tiene como objetivo reducir a la mitad su impacto ambiental en el consumo de energía primaria, las emisiones de las centrales eléctricas, los contaminantes del aire, el riesgo hídrico local y los volúmenes de aguas residuales y residuos.